7- A DIARIO LA VIDA ME REGALA...
(Ángel Luis Barahona, paciente de Ataxia de Friedreich).

A diario la vida me regala una nueva tautología,
un motivo más de ambiciosos sustantivos
a través de un sortilegio de mecánica diferente.

Cada día el mundo se inaugura en el vientre de una rosa,
odalisca violenta cuyo poder otorga a cada hombre
una razón de lágrimas.

En jardines enfermos pasea la ansiedad de los hombres
como rehenes de una caricatura de arquetipos.
Indiferentes gargantas postulando la espiral del tedio,
terrones de abulia disueltos en las horas
y la ilusión descabalgada en los muslos de la melancolía.

Cada huella oculta el sabor de alguna fruta;
inventario de uñas los arraigados ritos culturales
que confunden las flores con las cifras.

Partir hacia la nada sediento de objetivos;
esquinas mágicas de una luz que nunca llega
hasta la gota de sangre sentimental
que escapa de las venas al olvido.